*Libertad*
Meses y meses de hablar, meses y meses de propuestas y contrapropuestas, mesas redondas, reuniones, asambleas, seminarios. Jefes de Estado reunidos, Secretarías de Estado trabajando sin descanso, Ministerios de Asuntos Exteriores a pleno rendimiento. Finalmente, se aprobó realizar la acción de guerra, incruenta, más importante del momento… Se acordó, con la firma de la inmensa mayoría de países, reclamar y proceder a la devolución de la Estatua de la Libertad a Francia y de ahí llevarla a Gaza. El día de la partida desde NY sería el 17 de junio de 2026, aniversario 141 de la llegada a América. Con una ceremonia similar, pero preñada de significado, se le quitaba a EE. UU., La Libertad, libertad que había destruido en el mundo, y se le daba a Palestina, con esa simbólica entrega, una patente de corso, para que no volviera a ser masacrada impunemente por nadie. Miles de americanos, descontentos con Trump, despedirían, cantando a pleno pulmón, “La Marsellesa”, significación de la libertad en el mundo. La historia está para ser recordada, lejos de ser olvidada, ser reescrita, rectificando cuando es menester y ejemplarizando con nuevo brío, dejando claro que el respeto al derecho ajeno es la paz.
*B.M.*


Comentarios
Publicar un comentario