*Mi querido Confucio*


 Dijo Saramago, que había aprendido a no intentar convencer a nadie, porque el trabajo de convencer era una falta de respeto, un intento de colonización del otro. Pero la falta de respeto, cuando es la respuesta a una insistente y agobiante falta de respeto, por abuso de autoridad y avasallamiento del otro, es respetable y recomendable… 

Cuatro son los grandes preceptos que comparte Confucio, con Buda, con Jesús, con Platón, con Aristóteles, con Mahoma y con otros profetas... son estos: No matar, No mentir, No robar, No cometer actos deshonestos. Estos preceptos han hecho que la humanidad haya llegado hasta aquí, pero ya ves tú en qué condiciones… 
 En nuestro país, Ayuso más de 7000 muertos, Mazón 228. 
 No mentir... Tenemos ejemplos a Feijóo, González, los obispos. 
 No robar… ¡Ay, Dios…! Apúntate tú a los que quieras desde el rey, el PP, el PSOE y últimamente a Montoro y compañía… 

Confucio decía que mientras se añoraran estos principios significaba que estaban presentes… Y yo me pregunto: ¿Pero es que no hay nadie honrado por aquí? ¿Nadie añora? 

 *B.M.*

Comentarios

Entradas populares de este blog

*El Madrigal, el nostre troç*

*Viaje eclesiástico*

*Visión interesada*