*Familia*


Tengo un primo que, hablo de memoria, es médico en Mallorca, a Vicente Manuel le costó bastantes años acabar la carrera, yo no lo ataño a que fuera mal estudiante, es que el hombre se lo tomó con calma y eso me parece que para sus pacientes es una gran ventaja, porque al vivir en directo varias promociones ha tenido tiempo de ver inicios de técnicas en periodo de prueba y después las ha visto ya consolidadas. Y qué decir del asentamiento de las ideas básicas, seguro que las tiene radicadas en lo más profundo. El caso es que, como lo de la carrera médica es un continuo ponerse al día, él ha estado al día desde tiempos inmemoriales. 
Hace tiempo que no le veo, ni a él, ni a su hermana, que sé que quiere que le llamen Lola, en vez de María Dolores, que la llamaban. Creo que es una forma de cambiar. 
No tenemos mucha relación en la vertiente de la familia materna, y en cuanto a la paterna, tampoco, para qué vamos a fingir… 
 He visto, sin sentir envidia, casos de familias reunidas para una celebración anual o quinquenal, que tanto da, y ser tropecientos, que es un número entre cincuenta y ciento cincuenta, lo cual es ciertamente una cantidad muy potente. Aunque los grados de querencia no sean de gran quilataje. Al menos ven que si se presentara uno de ellos podría salir de concejal si le vota la familia. Cosa a tener muy en cuenta para colocaciones posteriores en el Ayuntamiento. 
 Yo, a duras penas, tengo que decir que no pongo empeño en ello, puedo reunir una mesa de más de seis u ocho, y es que la diosa fortuna repartió como quiso sus dádivas y aquel día yo no fui a la comida.  

*B.M.* 

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