*Petra*


 Siempre que me encuentro con Petra, me da alegría verla… y oírla. Le pregunto cada vez, si es feliz y me mira y sonríe y me dice convencida, sí, soy feliz. ¿Cómo no iba a serlo? 

Tengo todo lo que necesito, a un paso, el mar, y las montañas; no tengo necesidad de más cosas que las que tengo… Subo el castillo de Villavieja y desde allí veo el mar, el azul del cielo y el sol, y después, cuando voy a la orilla del mar, respiro profundamente y me tranquilizo. ¿Qué más necesito? Nada. 

 Tengo ilusión por cosas dentro de mi cabeza, proyectos y otro libro en camino… 
 No necesito ir de viaje, mi mundo está aquí, desde que nos conocimos en 1978. 
Petra vino de la Alemania del Este en un tiempo complicado, aquí hizo su vida y es encantador, oír su acento alemán, que ya nunca la va a abandonar. 
Esta gente, con su vitalidad, transmite tranquilidad y paz, y es que la buena gente nos allana los caminos de la vida, sin darse cuenta…

 *B.M.*

Comentarios

Entradas populares de este blog

*L’Egypte*

*Bous al Carrer*

*Apapachar*