*San Sostenes*
*San Sostenes*
-Oye, no lo digas así, que suena mal.
-Lo he dicho de todas las maneras posibles, lo sabes, yo lo escribo y tú al final lo corriges, si lo ven siete o setenta y siete me da igual.
-El hecho es que ahora, porque el martes próximo, veintiocho de noviembre, van los de la Conferencia Episcopal a Roma; a “calzón cagao” porque son unos meapilas; correquemecago, van al mandato del Papa Francisco y escasamente hace unas horas han aprobado un manifiesto contra la pederastia, que llevan practicando siglos y, dicen además, que van a indemnizar a las víctimas de sus abusos, aunque no haya sentencia judicial por medio. Esto es como el listo, que dimite un rato antes de que lo echen y encima se cree listo. Y el Papa para congraciarse con el mundo debería, una vez reunidos allí los obispos y demás tropa, debería, digo, destituirlos, desacralizarlos y secularizarlos y, en ese mismo acto nombrar mujeres sacerdotisas, porque ese mismo día es San Sostenes, no es broma -igual lo he acentuado mal- nombrarles, digo, sacerdotisas y obispas y arzobispas.
-¿Crees que no lo harían mejor que la banda de vejestorios caducos, maestros de sus teologías particulares y místicos de pacotilla.?
-Yo pienso que sí, que las mujeres pondrían orden y claridad.
¡Menos Te Deums y más cercanía a los jóvenes, a los pobres y ejemplarizar con la austeridad y la lucha contra las guerras!
¡A la mier…coles.
Venga…Corrige… y Publica…y si te apetece, dibuja unas crucecitas.
-Oye, y tu no tomes más de lo que estés tomando…
¡A tu madre que va!
*B.M.*
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